12 rollitos listos en 27 minutos totales, con solo 10 minutos de preparación y 12 de horneado. Rollitos de pizza con salami y queso hechos con masa, salsa de tomate, salami en rodajas y queso mozzarella fundido. Resultan perfectos para picoteo, fiestas o una merienda rápida. Sabrosos, fáciles y con ese toque casero que encanta.

Aperitivo perfecto para reuniones y picoteos
Rollitos salados con sabor clásico y toque casero
Rollitos de pizza con salami y queso – en 20 min conquistan por su sabor intenso, textura esponjosa y preparación sencilla en tiempo récord. Cada rollito combina masa suave, salsa de tomate con notas umami, rodajas de salami, queso fundido y un toque de orégano. Una forma divertida de disfrutar los sabores clásicos de la pizza en un formato ideal para compartir, servir en fiestas o llevar como tentempié.
Estos rollitos destacan por su versatilidad: pueden servirse calientes recién horneados o fríos al día siguiente, y resultan igual de sabrosos. La clave está en la calidad de la masa y el equilibrio entre la salsa y el queso para lograr un interior jugoso sin que el rollo pierda su forma ni quede húmedo.
Breve historia del plato
Los rollitos de pizza tienen su origen en la adaptación moderna de recetas italianas como el stromboli o rotolo, donde los ingredientes se enrollan en una masa antes de hornearse. Este formato surgió como una respuesta práctica para disfrutar del sabor de la pizza sin necesidad de porciones grandes o cubiertos, convirtiéndose rápidamente en un clásico de reuniones familiares, picnics y aperitivos rápidos.
Cómo influyen los ingredientes en el resultado
- La masa define la textura: una base tierna y aireada garantiza un rollito suave con bordes dorados.
- La salsa de tomate aporta humedad y acidez para equilibrar el salami y el queso.
- El salami añade un sabor fuerte y especiado que resalta al hornearse.
- El queso mozzarella se funde creando el clásico efecto cremoso y elástico.
- Las especias como orégano y ajo en polvo intensifican el perfil aromático típico de la pizza casera.
Por qué te encantará esta receta
- Lista en solo 20 minutos
- Ideal para fiestas, picnics o meriendas saladas
- Fácil de personalizar con otros rellenos
- Perfecta para niños y adultos
- Se puede preparar con antelación y congelar
Ideas para seguir explorando recetas relacionadas
Si te interesa perfeccionar la técnica de la masa casera para mejorar aún más el resultado de estos rollitos, te recomendamos visitar este enlace:
Masa para pasta casera: receta fácil con 3 ingredientes
Si te gustan las recetas con sabor italiano y buscas una opción más gourmet, descubre esta alternativa:
Receta de pizza de trufa casera
Conservación y preparación anticipada
Los rollitos de pizza con salami y queso se pueden preparar con antelación, lo que los convierte en una opción excelente para eventos o para planificar las comidas de la semana. La masa puede enrollarse, cortarse y guardarse en la nevera hasta 24 horas antes de hornear. Una vez horneados, se conservan bien en un recipiente hermético durante 3 días y pueden recalentarse en horno o freidora de aire para recuperar su textura crujiente.
Para congelar, coloca los rollitos ya formados en una bandeja hasta que estén firmes y luego pásalos a una bolsa o recipiente. Hornear desde congelado solo requiere unos minutos extra, sin perder jugosidad ni forma.
Técnica clave: enrollado y horneado
El éxito de estos rollitos depende de distribuir los ingredientes en capas finas y uniformes para evitar que rebosen durante el horneado. El enrollado debe ser firme pero sin presionar demasiado, y el corte limpio asegura una forma perfecta en espiral tras el horneado. Hornear a temperatura alta garantiza bordes dorados, queso burbujeante y una base ligeramente crujiente.
- Precalentar el horno:
Calienta el horno a 200°C (400°F). Forra una bandeja de horno grande con papel de hornear. - Extender la masa:
Coloca 450 g de masa de pizza (1 lb) sobre una superficie ligeramente enharinada. Usa un rodillo para formar un rectángulo de aprox. 30 x 40 cm (12 x 16 pulgadas) y 0,6 cm (¼ pulgada) de grosor. - Añadir la salsa:
Extiende 240 ml de salsa de tomate (1 cup) de manera uniforme sobre la masa, dejando un borde de 1 cm (½ pulgada) en los extremos para evitar derrames. - Incorporar el queso y el salami:
Reparte 150 g de queso mozzarella rallado (1,5 cups) sobre la salsa. Coloca encima 115 g de salami en rodajas (4 oz). Espolvorea 1 g de orégano seco (1 tsp) y 3 g de ajo en polvo (1 tsp). - Enrollar la masa:
Enrolla la masa comenzando por el lado más largo, de forma firme pero sin presionar demasiado. Sella el borde final con los dedos. Corta el rollo en 12 piezas iguales de aprox. 3 cm (1,25 pulgadas) de grosor con un cuchillo afilado o un cuchillo de sierra. - Preparar para hornear:
Coloca los rollitos con el corte hacia arriba sobre la bandeja, dejando al menos 2,5 cm (1 pulgada) entre ellos. Pinta la superficie con 1 huevo batido para dorar. - Hornear:
Hornea durante 12 minutos, o hasta que los rollitos estén dorados por arriba y el queso esté burbujeante.
Si no están dorados, hornea 2 minutos más. - Reposar y servir:
Deja reposar los rollitos 5 minutos en la bandeja antes de servir para que el queso se asiente y evitar quemaduras. Servir calientes.
FAQ question¿Puedo usar masa de pizza comprada para los rollitos?
Sí, puedes usar masa de pizza comprada. Ahorra tiempo y funciona muy bien si está fresca o descongelada correctamente. Déjala reposar unos 10 minutos antes de estirarla para que sea más manejable.
FAQ question¿Qué puedo usar en lugar de salami?
Puedes sustituir el salami por pepperoni, fiambre de pavo o incluso verduras asadas. Elige opciones finas para que se enrollen con facilidad y no suelten demasiado líquido al hornear.
FAQ question¿Por qué mis rollitos salen húmedos por debajo?
El exceso de salsa o queso puede provocar humedad. Extiende capas finas y usa papel de hornear para absorber la humedad. También puedes hornear en la parte baja del horno para dorar la base.
FAQ question¿Se pueden hacer con anticipación?
Sí. Los rollitos se pueden formar y refrigerar sin hornear hasta 24 horas antes. Después de horneados, se conservan en la nevera hasta 3 días o se pueden congelar por 2 meses.
FAQ question¿Puedo congelar los rollitos? ¿Cómo los recaliento?
Sí, los rollitos horneados se congelan bien. Déjalos enfriar, congélalos en una bandeja y guárdalos en bolsas herméticas. Recalienta en horno a 175°C (350°F) durante 8–10 minutos. Evita el microondas, ya que los ablanda.
FAQ question¿Cómo puedo adaptar esta receta sin gluten o sin lactosa?
Usa masa de pizza sin gluten y queso rallado sin lactosa para adaptar la receta. Cambia el salami por verduras o jamón sin gluten si es necesario. La textura cambia un poco, pero siguen siendo deliciosos.
FAQ question¿Cuál es la mejor forma de servir los rollitos?
Sírvelos calientes con salsas para mojar como marinara, salsa de ajo o pesto. Puedes colocarlos en una tabla de madera, decorados con hierbas frescas o un poco de queso rallado para un toque más vistoso.
He probado esta receta varias veces para lograr el equilibrio perfecto entre una masa suave, queso bien derretido y bordes ligeramente crujientes sin que resulten grasientos. Estos rollitos se han convertido en uno de mis aperitivos más populares.
PEKIS – chef profesional y desarrollador de recetas con más de 25 años de experiencia, especializado en cocina europea e internacional.
Ideas para servir con estilo
Rollitos de pizza con salami y queso – en 20 min destacan cuando se sirven tibios, recién salidos del horno, con el queso aún fundido y los bordes ligeramente crujientes. Acompáñalos con salsas caseras como marinara, pesto o una sencilla salsa de ajo para realzar los sabores de la masa, el tomate y el salami. Funcionan bien en una tabla de aperitivos, platos compartidos o incluso como merienda rápida para niños. Presentados en una bandeja de madera o plato blanco, resaltan aún más su textura dorada y su aspecto en espiral.
Adaptaciones para diferentes dietas
Es sencillo ajustar esta receta a necesidades alimentarias específicas. La base se puede elaborar con masa sin gluten, lo que permite disfrutar de los mismos sabores sin preocupar a los celíacos. También es fácil cambiar el queso por queso vegano rallado o sin lactosa si hay intolerancias. Para una versión más ligera, basta con reemplazar el salami por pavo, jamón cocido fino o verduras asadas. Las variaciones mantienen el aspecto y la practicidad del formato enrollado.
Perfectos para preparar con antelación
Los rollitos son ideales para meal prep o para planificar eventos. Pueden montarse y guardarse sin hornear en la nevera hasta el día siguiente, o congelarse formados para hornearlos cuando se necesiten. Una vez horneados, se conservan bien durante varios días y recuperan su textura crujiente al recalentarse en horno o air fryer. Este detalle hace que sean útiles para comidas improvisadas, meriendas de fin de semana o almuerzos rápidos durante la semana.
Por qué elegir esta receta
Rollitos de pizza con salami y queso – en 20 min combinan velocidad, sabor y sencillez. Listos en menos de media hora, con ingredientes fáciles de encontrar y una presentación atractiva que gusta a grandes y pequeños. Son perfectos para fiestas, picnics, cenas informales o como tentempié caliente. Una opción infalible cuando se necesita un bocado sabroso, rápido y hecho en casa, sin complicaciones.
Alérgenos: Gluten, lácteos, huevo
Sustituciones:
- Usar masa de pizza sin gluten para una versión sin gluten.
- Sustituir el queso por queso rallado sin lactosa para una opción sin lácteos.
- Reemplazar el salami por pavo o verduras asadas para reducir grasas o evitar embutidos.
Vitaminas y minerales (por ración):
- Vitamina A: 6% VD – Apoya la vista y el sistema inmunológico
- Vitamina C: 4% VD – Favorece la salud de la piel y actúa como antioxidante
- Calcio: 10% VD – Esencial para huesos y dientes fuertes
- Hierro: 6% VD – Contribuye al transporte de oxígeno en la sangre
Antioxidantes:
- Licopeno (salsa de tomate): 2,5 mg – Protege las células contra el daño oxidativo
- Orégano (seco): 0,4 mg – Contiene compuestos antiinflamatorios





